
Cómo te expresas dice mucho de ti
Hoy comienza una nueva trilogía en la que nuestra protagonista será la palabra. Para que la comunicación de tu marca fluya en una sola dirección: la de tus clientes.
Lo que necesita tu marca para que los clientes adecuados se fijen en ella:
Branding + Copywriting + Creatividad
Apúntate para recibir estrategias, consejos e inspiración que te ayuden a tener una marca de alto rendimiento.
Hoy comienza una nueva trilogía en la que nuestra protagonista será la palabra. Para que la comunicación de tu marca fluya en una sola dirección: la de tus clientes.
Siempre hay una idea que justifica todo lo que haces. Y con tu marca pasa lo mismo. Porque esa idea es la base desde la que se construye todo su branding: identidad, valores, propósito, propuesta, voz, estilo, estrategia y comunicación. Y es que cuando una persona decide comenzar un proyecto propio hay algo que le empuja por encima de todo a dar el paso. Esto es el gran concepto de marca.
Piensa en alguien. Una amiga, por ejemplo. ¿Qué palabras te vienen a la cabeza? ¿Con qué temas la relacionas? Tal vez con vida sana, defensa de los animales, viajes en autocaravana, sostenibilidad o moda urbana. Pues ya lo tienes, estos son los territorios creativos donde se mueve tu amiga y con los que tú la asocias. En el mundo de las marcas pasa algo parecido, si no igual.
Para presentarte este temazo he querido retroceder en el tiempo y volver a los orígenes, allí donde nacieron las ideas: en la mitología griega. Vamos a ver la importancia de mostrar aquello que te hace diferente: tu propuesta de valor. Con ella empieza la divina creatividad de tu marca.
Para este 2022 tengo preparada una saga completa sobre la creatividad aplicada al copywriting y a las marcas, que iré publicando en este blog. Y para que nada te suene a chino, hoy quiero explicarte cómo entiendo yo el proceso creativo y todo lo que te vas a encontrar en los próximos meses.
Existen 19 tipos de sonrisas. Y de risas, hay tantas como infinitas. Discretas, escandalosas, agudas, potentes, contagiosas… Estas, las contagiosas, me chiflan. Cuando las escuchas es inevitable empezar a reír, tanto que a veces duele hasta la pancha. Te ríes sin saber el motivo, y no puedes parar. Este efecto es muy parecido a lo que provoca el (buen) copywriting. Te gusta, te atrae, te contagia buen rollo.
El marketing tiene la capacidad de motivar a las masas para participar en las campañas más nobles y altruistas, pero también un potencial implacable para incentivar una compra irracional y compulsiva. Hoy, en el famoso “Black Friday”, yo digo alto y claro: Menos Black, Más Blog.
A mucha gente, y a muchas marcas, les falta una razón de peso para vivir, disfrutar y cuidar de todo lo que les rodea. Están vacías de inquietudes y de buenos propósitos. Y, en realidad, es sencillo, tan solo hay que hacer una cosa: encontrar un porqué.
Cuando vendes en internet crees que no tienes delante a tus clientes, pero sí los tienes. Incluso más cerca que si visitaran tu tienda física. Están mirando tus productos con lupa: desde su móvil, tablet u ordenador. ¡Estás en sus manos!
Es el momento de decirles qué tienes para ellos y por qué deben elegirte a ti y no a otros.
En LinkedIn, todos saben de todo. Eso parece. La mayoría de profesionales tiene una amplia experiencia. Añaden títulos, másters y certificaciones, y llenan su perfil de yoísmos: Yo sé, Yo tengo, Yo trabajo, Yo soy. La cuestión es saber cómo “venderte” bien en LinkedIn, sin prepotencia ni cuentos de ciencia ficción, ¿verdad? Con mucha humanidad.